Lee mi otro Libro: Yacumama

Iba hacia la salida cuando,de repente,comenzo a llover,pero no en la calle,sino dentro del restaurante.El agua caia del techo a traves de unas boquillas y en pocos segundos  empapo la alfombra, los manteles de damaco,el vestido de seda salpicado con vino tinto, las entradas,los platos  principales y los postres de los clientes;por supuesto, 

la pandilla salvaje cap10,11,12 y 13

tambien a los clientes  que gritaban y se levantaban de las mesas. !Fuego! exclamo alguien . !Es la alarma contra incendios , todos, fuera de aqui! Por un instante hubo panico . las mujeres corrian con los bolsos sobre la cabeza y os hombres las seguian, escondidos bajo sus abrigos. Un mesero de traje blanco y negro intentaba restablecer  la calma .

Esperaron a los bomberos; en algun  lugar del restaurante tenia que haberse producido fuego, pues de lo contrario, no se habria activado el sistema de aspersion automatica. Los clientes estaban tan enfurecidos, quejandose y lanzando rudas amenazas, que nadie  noto que no habia humo ,ni tampo co olor a quemado.Para ser exactos.