Quetzalcóatl era un Dios con forma de serpiente, que se encontraba en el valle Anáhuac. 

Esta serpiente tenía la peculiaridad de ser amable con todos en la zona.

Hasta que un día estaba tranquilamente caminando por el valle, pero presentía que algo o alguien lo venía persiguiendo.

Después de caminar por un determinado tiempo empezó a escuchar respiraciones atrás de él

, se dio la vuelta y observo que había un gran Dios león. Era amigo de Quetzalcóatl.

-¿Qué haces aquí gran amigo? Dijo Quetzalcóatl.

-vine a visitarte amigo. Dijo el Dios león.

- ¿quieres venir a mi refugio a pasar el rato?

-claro cómo no. Dijo el dios león.

Al rato tocaron la puerta del refugio de Quetzalcóatl

entusiasmado fueron a abrir para ver quién era, cuando abrieron, afuera se encontraba el Dios de la destrucción quien toco la casa y la hizo desaparecer instantáneamente.

Quetzalcóatl enojado por la desaparición de su refugio, desato su ira y junto al Dios león sacaron su poder interior

luego se desató una fuerte batalla

que gracias a que el Dios león y Quetzalcóatl se fusionaron para ser más fuertes que el dios de la destrucción. 

Después de una larga batalla el dios león y Quetzalcóatl finalmente lograron derrotar al dios de la destrucción